NO A LAS 65 HORAS LABORALES.
Hacía días que mis ojos no leían ni yo escuchaba una buena noticia, en principio, a favor de los trabajadores no solo de este país sino de toda Europa, os hago un resumen.
El Parlamento Europeo bloqueó este miércoles la norma que permite ampliar la jornada laboral máxima a 65 horas semanales, que fue aprobada por los ministros de Trabajo de los 27 el pasado mes de junio con el voto en contra de España. Los eurodiputados aprobaron por mayoría absoluta una serie de enmiendas que exigen que en un plazo máximo de 3 años se supriman todas las excepciones (’opt out’) a la jornada laboral de 48 horas semanales.
La Eurocámara exigió además que se considere tiempo de trabajo la totalidad del tiempo de guardia, incluido el periodo inactivo. Esto cuestiona también el acuerdo alcanzado por los Veintisiete, según el cual el periodo inactivo de la guardia (por ejemplo, cuando un médico duerme en un hospital) no debe considerarse como tiempo de trabajo a menos que la legislación nacional, un convenio colectivo o un acuerdo entre interlocutores sociales disponga lo contrario.
Las enmiendas fundamentales recibieron un respaldo muy superior a la mayoría absoluta de 393 votos que era necesarios para que salieran adelante. El voto de la Eurocámara abre ahora un nuevo periodo de negociación de 90 días (denominado ’conciliación’) entre el Parlamento y el Consejo al cabo del cual, si no hay acuerdo, decae el texto.
Personalmente es un agrado conocer esta noticia y que las próximas negociaciones lleguen a igual o mejor puerto. No sé si esta resolución es porque hoy en día ninguna o casi ninguna empresa del continente tiene para sus plantillas actuales tal duración de jornada con los mismos trabajadores, quizás simplemente adoptar dicha posición viene dada por los tiempos, para no acrecentar más las listas del paro, por no tener que pagar las administraciones más despidos y parados, por la presión sindical y social a la medida.
Además desde los sindicatos insistimos a las empresas, administraciones y gobiernos que adopten las mediad oportunas para el desarrollo de las políticas de conciliación familiar y laboral, impulsen el desarrollo de la ley de igualdad y doten al trabajador de protección en caso de problemas familiares importantes. Espero que a cambio de esto, no suframos ningún revés en nuestros derechos. Ya se luchó mucho en su día por la reducción a 8 horas diarias de la jornada de trabajo.
No volvamos a la involución laboral.
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